Hace una semana que vivimos una nueva emergencia, esta vez inesperada y que sobrepasa cualquier nivel que nadie se hubiera podido imaginar a tan corto plazo. Sabemos que vivimos tiempos difíciles y que los días que nos esperan por delante serán largos. Pero volvemos a hacer un llamamiento a la calma. Como siempre decimos, tenemos que confiar en la ciencia para resolver este tipo de crisis: el personal médico nos dice que, para evitar ser agentes transmisores, lo mejor que podemos hacer es quedarnos en casa. Por ello animamos a todas nuestras rebeldes a bajar el ritmo, a decrecer nuestra actividad y a continuar organizándonos, pero de una forma distinta.
No hay mejor ejemplo de cultura regenerativa, como forma de pensar que pone la vida en el centro, que el redescubrimiento de nosotras mismas a que nos está llevando nuestra cuarentena. Ante el egoísmo al que estábamos acostumbradas nos hemos encontrado con redes de apoyo vecinal; ante el individualismo neoliberal hemos redescubierto nuestras comunidades. Creemos que, para hacernos fuertes, para hacer que cada una de nosotras salgamos más empoderadas después de esta emergencia sanitaria, necesitamos construir comunidades resilientes.
Para hacerlo dependemos de todas. Necesitamos que, ahora más que nunca, estemos unidas con nuestras vecinas, que nos cuidemos y nos escuchemos; que nos pongamos al servicio de quienes más lo necesitan, siempre cuidando a la vez de nosotras mismas. Y, al mismo tiempo, reconocer que está bien pedir ayuda; que no hay problema si nos da miedo la crisis, que podemos acurrucarnos de miedo bajo una manta porque habrá alguien al otro lado de la puerta para escucharnos y ayudarnos.
De esta crisis, de la primera emergencia que se ha hecho de pronto muy real para todas nuestras sociedades, saldremos más fuertes, no nos queda duda. Como Extinction Rebellion nos seguiremos organizando de nuevas formas, construyendo comunidad, pensando en posibles rebeliones y reflexionando juntas sobre utopías del día a día. Y queremos que tu, querida rebelde, también formes parte. Súmate a la cuarentena rebelde.
Como siempre, amor y rabia. Pero, especialmente, mucho amor.
Cuidémonos.
Rebel·lió o Extinció Barcelona